Seguramente usted lo ha visto en las películas: la madre después del parto sale con el cuerpo perfecto y el abdomen plano, como si hubiera tenido a su hijo por arte de magia. Pero, la realidad es muy distinta y para recuperar la figura se deben esperar algunos meses. La clave es mantener una dieta adecuada, lactar y hacer ejercicio.
Durante los tres primeros meses de vida del bebé no se debe hacer ninguna dieta restrictiva, pues los requerimientos nutricionales aumentan y se necesitan más energías para poder amamantar. La idea es tener una alimentación colmada de proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales para favorecer la recuperación del organismo. Además, de esta forma, se estimula la producción y la calidad de la leche.
“La recomendación en esta etapa es tener paciencia. No se van a perder varios kilos en una misma semana, sino que paulatinamente se disminuirá de peso y poco a poco la figura del cuerpo volverá a estar como era antes de la gestación”, afirma la nutricionista y dietista Luz Stella Hidalgo.
Inicialmente, después del parto se pierden entre cinco y siete kilos, que corresponden al bebé, el líquido amniótico, la placenta y el útero. Luego, disminuye la hinchazón de las piernas y las manos y se reduce el tamaño del abdomen.
Es posible que recuperar el cuerpo tarde otros nueves meses. “Por eso, hay que cuidar la calidad y la cantidad de los alimentos, diseñando una dieta balanceada según las necesidades específicas. Eso sí, no hay que cambiar la rutina de comer cinco veces al día”, recomienda la nutricionista.